El titular de la Red Solidaria disertará en Posadas

El Dr. Manuel Lozano presentará la organización y sus campañas a nivel nacional y local. Será el 18 de marzo a las 18 en la sede de la Confederación Económica de Misiones, Sarmiento 2183 Piso 3.

POSADAS. - La Red Solidaria invita a todos los misioneros a participar de la primera Convocatoria abierta a voluntarios a realizarse en la Ciudad de Posadas el día 18 de marzo a las 18 horas en la sede de la Confederación Económica de Misiones, Sarmiento 2183 Piso 3.

En la oportunidad se contará con la presencia del Director de la Red Solidaria a nivel nacional el abogado Manuel Lozano, quien presentará la organización y sus campañas a nivel nacional y local.

La Red Solidaria a nivel nacional nació en 1995 como una respuesta a nuestra necesidad de crear un mecanismo que permitiera brindar ayuda a numerosas situaciones y necesidades que se nos presentan a diario en el ámbito social.

"Es una organización en la que los voluntarios intentamos salvar vidas o mejorar la calidad de vida de otras personas. Establecemos un nexo entre los que necesitan y aquellos que puedan cubrir cada una de éstas necesidades. Creemos en la capacidad de nuestra sociedad en generar cada día más respuestas solidarias", señala la información de su página web http://www.redsolidaria.org.ar/

La Red Solidaria tiene por objeto patrocinar el desarrollo social de la cultura solidaria en todo el país. La Cátedra “Cultura Solidaria” surge como un espacio dedicado a fomentar y difundir la ayudar a personas que se encuentra en situación de necesidad y permitir trasformar la “situación del prójimo”.

MANUEL LOZANO. Manuel Lozano es desde el año 2007 el director de la Red Solidaria en la Argentina y tiene a su cargo la Cátedra de Cultura Solidaria.

Además, desde el 2006 gestiona las actividades de la Red Solidaria Central y coordina las redes del interior del país, los voluntarios, las relaciones institucionales, las campañas, y su orientación general.

Lozano es abogado recibido en la Universidad Católica de Salta, subsede Buenos Aires, y cuenta con un posgrado en “Especialización en Organizaciones sin Fines de Lucro” otorgado por la Universidad San Andrés, la Universidad Torcuato Di Tella y el CEDES.

El “heredero” de Juan Carr al frente de la Red Solidaria, es un joven que a los trece tuvo su primera experiencia solidaria acompañando a las niñas de un hogar en la ciudad bonaerense de Chascomús, donde vivió con su familia hasta los 15.

En una fiesta de cumpleaños, Juan Carr lo sorprendió con el anuncio de que lo había elegido como su sucesor al frente de la dirección nacional de la Red Solidaria. “Creí que era un chiste”, dijo sorprendido en una entrevista en 2010. Desde entonces, creó más de setenta sedes en todo el país. Atiende el teléfono de la entidad y hasta reparte comida caliente por la calle. Pero no cobra un peso.

“Manuel Lozano tenía trece años cuando hizo su primer trabajo solidario. Vivía en la localidad bonaerense de Chascomús, con su madre abogada y su padre ingeniero agrónomo, su hermana, su madrina y su abuela. Manuel Lozano de trece, que ayudaba en un hogar para menores de su ciudad, mutó en el Manuel de 15 que comenzó a trabajar con los chicos del comedor de una parroquia; luego, en un proyecto de inclusión social a través del arte, y más tarde con niños de una escuela especial”.

LA HISTORIA. La Red Solidaria nació en 1995 como una respuesta a nuestra necesidad de crear un mecanismo que permitiera brindar ayuda a numerosas situaciones y necesidades que se nos presentan a diario en el ámbito social.

Es una organización en la que los voluntarios intentamos salvar vidas o mejorar la calidad de vida de otras personas. Establecemos un nexo entre los que necesitan y aquellos que puedan cubrir cada una de éstas necesidades. Creemos en la capacidad de nuestra sociedad en generar cada día más respuestas solidarias.

Se recibe un promedio de 100 llamadas diarias, aunque esa cifra se triplica en emergencias. Al comienzo, la mayoría eran pedidos, pero en la actualidad, el 50% de la gente se comunica para ofrecer tiempo, ropa, medicamentos, un órgano...

EL CREADOR. Juan Carr creó junto con su mujer y tres amigos la Red Solidaria, una estructura simple que genera magia cada vez que se lo propone: une a quien necesita con quien puede ayudar. Así de efectiva.

LA RESPUESTA CONMOVIÓ. La Red Solidaria había pedido solamente ocho personas que donaran sangre para salvar a Martín Herrera, de 11 años. En poco tiempo unas 140 personas respondieron al llamado. Emocionados, los voluntarios de la Red se sorprendieron por la gran convocatoria que habían tenido.

El mecanismo era simple: se enteraban de alguien que necesitaba ayuda, entonces la pedían a través de los medios de comunicación, y la respuesta no tardaba en llegar.

Incluso, lo de Martín no era una donación de sangre habitual: los dadores debían recibir un corticoide que estimulara la producción de una variedad de glóbulos blancos y luego someterse a la extracción.

Aquel lunes de marzo de 2006, el sector Hemoterapia del Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez se llenó de personas que, sin conocer a Martín, estuvieron dispuestas a ayudarlo.

CATEDRA DE CULTURA SOLIDARIA. La cátedra de cultura solidaria nace a raíz de una iniciativa de la Red Solidaria motivada en la posibilidad real y concreta de desarrollar la cultura solidaria en nuestra sociedad.

Tal posibilidad se apoya en la verificación de una genuina y permanente respuesta de los miembros de nuestra sociedad a las distintas solicitudes de ayuda a la solución de las diversas necesidades que afectan al prójimo.

El desarrollo de la cultura solidaria se realiza a través del proceso por el cual esa actitud de atención y respuesta solidaria que la sociedad efectúa transitoria y reactivamente ante múltiples y diversas convocatorias concretas, se convierten en disposición incorporada en la sociedad; de modo que al horizonte de vida de sus miembros (ocupaciones y preocupaciones; trabajo; familia; amigos ,etc.) se suma la consideración del otro en situación de necesidad.

Es de esta manera que la solidaridad adquiere características constitutivas que hacen a la cultura: solidez, profundidad y perdurabilidad en el ser y el hacer de la sociedad y los miembros que la componen.

La cultura solidaria es el resultado de un individuo y una sociedad que prestó atención a las necesidades de sus semejantes, que reflexionó al respecto y que decide ayudar a transformar positivamente la situación de su prójimo necesitado.

Los emprendimientos que lleva adelante la Cátedra de Cultura Solidaria aspiran a ser un aporte para la instauración de una sociedad con cultura solidaria.

La cátedra es llevada adelante mediante un curso gratuito estructurado en torno a la exposición de las diversas temáticas que involucran a la solidaridad (chicos perdidos, vivienda, donación de órganos, desnutrición, personas en situación de calle, comedores comunitarios, donación de sangre etc. etc.), convocando para ello a un cuerpo docente compuesto por personas con un alto grado de conocimiento de la temática solidaria que los ocupa pero por sobre todo por un real compromiso solidario.

Se añaden a esto, clases orientadas a la práctica general de la solidaridad a través de la transferencia de la experiencia de la red solidaria respecto de la orientación y acompañamiento de las personas que se encuentran en diversas situaciones de necesidad.

Desde 1999, más de 800 personas a través de sus 25 ediciones han podido tomar conocimiento y conciencia de lo que concierne a la solidaridad y la acción solidaria.

Fuente: PrimeraEdición